martes, 24 de agosto de 2010

O Wunderlieb, o Liebesmacht!






O Wunderlieb, o Liebesmacht!
du kannst was nie kein Mensch gedacht:
Gott seinen Sohn abzwingen
O Liebe! du bist stark,
du streckest den in Grab und Sarg,
vor dem die Felsen springen.

Du marterst ihn am Kreuzesstamm
mit Nägeln und mit Spießen;
du schlachtest ihn als wie ein Lamm,
machst Herz und Adern fließen:
das Herze mit der Seufzer Kraft,
die Adern mit dem edlen Saft
des purpurroten Blutes.

* * *

¡O admirable amor! ¡O poderoso amor!
Tú pudiste lo que ningún hombre pudo imaginar:
Arrancar a Dios su propio hijo.
¡O amor! Por tu poder
él yace en la tumba y en el ataúd,
Él, ante quien las rocas se quiebran.

Tú le torturas en la cruz
con clavos y lanzas;
lo degüellas como a un cordero
Haces que fluyan
de su corazón nobles suspiros
y de sus venas preciosa savia,
purpúrea sangre.

2 comentarios:

JuanMa dijo...

Muchas gracias por traer belleza con palabras, imágenes y música a este rinconcito tuyo de internet.

Daniel Vicente Carrillo dijo...

El placer es mío. La música procede de Theatrum musicum, de Samuel Capricornus, a cargo de la Chapelle Rhenane. Uno de los mejores discos barrocos que he escuchado, si no el mejor (y he escuchado muchos).