miércoles, 14 de noviembre de 2007

En el laberinto


Sólo la geometría puede proporcionarnos el hilo conductor para recorrer el laberinto de la composición del continuo, de los máximos y de los mínimos, y de lo indesignable, y del infinito, y nadie llegará a una metafísica verdaderamente sólida sin haber recorrido dicho laberinto.

Así como una misma ciudad, vista por diferentes partes, parece otra y resulta como multiplicada en perspectiva, así también sucede que, por la multitud infinita de sustancias simples, hay como otros tantos universos diferentes, los cuales no son, sin embargo, sino perspectivas de uno solo, según los diferentes puntos de vista de cada mónada. Ésta es la manera de conseguir la mayor verdad posible con el mayor orden posible.

Leibniz.





El dibujo es del puño de Leibniz y se encuentra en el manuscrito de la Characteristica.

En breve me ocuparé de este espinosísimo asunto.

10 comentarios:

Emilio Cervantes dijo...

El laberinto al que se refiere Leibniz no pertenece a la Geometría, sino que está más cercano a la Biología. Afortunadamente, la llave del laberito de la Naturaleza está bien custodiada, pero
no debemos nunca forzar su entrada con la ganzúa del darwinismo.

La mitad de tus entradas que prometían una discusión abierta e interesante están contaminadas por intervenciones interesadas y asfixiantes. Sé que es muy importante para un blog tener participación abundante, pero a veces es mejor el silencio.

Sursum corda! dijo...

Jaja.

Supongo que las intervenciones aireadas y desinteresadas son las de Emilio Cervantes y las de Cervantes, Emilio. Usted y su obsesión contra el darwinismo tienen poco que ver con la ciencia o la filosofía.

Pero los que le llevamos la contraria no le dejamos disparatar a solas.

Ya no necesito leer blogs de humor. Me basta usted y me sobra.

Sursum corda! dijo...

irichc:

¿No le parece que Leibniz se mete en unas dificultades excesivas?

Dice: "por la multitud infinita de sustancias simples, hay como otros tantos universos diferentes"

Si hay una multitud infinita de sustancias y cada una de ella refleja el universo, cada una, a pesar de ser simple será infinitamente compleja pues refleja la totalidad del universo.

Y si es infinitamente compleja, pero es simple ¿por qué no decir que cada una es un universo aislado ya que no interacciona con otros? Y si esto fuera así, ¿no estaría necesariamente tan compuesta de mónadas como el primer universo que suponíamos? ¿Y así, ad nauseam?

Creo que de esa forma sólo se reproduce la totalidad en cada parte y el problema total se reproduce en cada problema parcial, multiplicándose el problema al infinito en cada intento de solución.

Atilio dijo...

Khun Irichc:

Que quiere decir Leibniz con el termino "geometría"? Serán las matemáticas, como diría un físico hoy?


Sursum:

Yo abandoné las discusiones con Cervantes cuando el mismo dijo que la astrología es una "ciencia" (como conjunto de conocimientos, evidentemente confundiendo "conocimientos" por creencias, algo común entre los creyentes), era "respetable... conocimiento racional, sistemático, exacto, verificable y por consiguiente falible".
Nótese la anarquía conceptual, las contradicciones, la preocupación por la retorica y el olvido de la verdad científica que se notan en tan pocas palabras: falible y exacta (desde cuando es exacta la astrología?, no querrá decir falsifiable y asi evitar tal fragante contradicción?), verificable la astrología?, racional y sistemático: eso también se puede decir de un poema, etc.

Daniel Vicente Carrillo dijo...

Emilio:

Por un lado no me gusta que las discusiones tomen un cariz agrio e inhóspito; pero por el otro lo aprecio, ya que desconfío de toda cordialidad filosófica que presuponga un consenso. Prefiero las aguas algo agitadas a la balsa de aceite, pues al menos de esta forma tengo la certeza de que la verdad, por mor de la autodefensa, es tomada en serio. Fluya la argumentación por cauces racionales y civilizados, más o menos amables, y evite el despeñadero del amor propio y las polémicas por palabras. Cumpliéndose estas condiciones, yo sólo puedo imponer un silencio: el mío.

Yendo ya al grano, que el laberinto de Leibniz posee implicaciones biológicas es algo con lo que estoy muy de acuerdo. De hecho, toda afirmación axial (metafísica) de Leibniz pretendía tener estatus científico y repercusión interdisciplinar. Este blog se enfrenta a la titánica tarea, sin duda muy por encima de las fuerzas y el talento de su autor, de actualizar a Leibniz a la luz de los descubrimientos de Darwin, desautorizar al emergentismo imperante y remozar el principio místico agustiniano -la gracia- en detrimento de toda escatología materialista o psicologista. Con lo cual espero que las graciosas Musas me infundan entusiasmo y destreza, porque, como podéis comprobar, ando poco inspirado últimamente.

Daniel Vicente Carrillo dijo...

Sursum:

Si lo que expresa lo complejo tiene que ser igualmente complejo, ¿no se está confundiendo el expresar con el reproducir? El lenguaje expresa la realidad sin reproducirla, razón por la cual nos permite abreviar.

Sursum corda! dijo...

irichc:

Lo que expresa lo complejo puede transmitir información sólo hasta su propio nivel de complejidad. Eso es básico en una teoría de la información.

Usted que ya se maneja en blogs y enlaces tiene que haber visto el código de color en hexadecimal.

Así, por ejemplo, usando el sistema RGB, (red, green, blue) en que la pantalla emite tres colores: rojo, verde y azul, 000000 es negro y FFFFFF es blanco porque se codifica cada color por un sistema hexadecimal de 0 a 9 más A, B, C, D. E y F, (F 0 16) y hay 16 por 16 combinaciones que dan 256 tonos de rojo y otras tantas de verde o de azul, dando 16.777.216 de colores.

Ese sistema de descripción del color es capaz de expresar 16 millones largos de colores, pero no más. Todos los colores intermedios no puede expresarlos.

Pues bien, si el lenguaje expresa algo sólo con un signo A, sólo podrá expresar una cosa llamada A.

Si recurrimos a AA, como signo distinto de A, en realidad estamos recurriendo a la posición, como con los números binarios y ya tenemos 00, 0A y A0, pero sólo podemos expresar tres cosas, o dos y su ausencia.

Por eso insisto en que si el lenguaje refleja una realidad compleja debe ser complejo y si la mente intuye una relaidad compleja, debe ser COMPLEJA.

Una mente simple sólo podría estar e un estado, o en dos: "encendido" y "apagado", consciente e inconsciente y sólo podría intuir una cosa y su ausencia. Nunca un universo complejo.

Si la mente puede intuir el espacio es porque es plural o la pluralidad del espacio no cabría en términos de información en la mente simple.

Sursum corda! dijo...

Quería escribir F = 16

pero, al tener el teclado en bloqueo de mayúsculas, salió 0.

Daniel Vicente Carrillo dijo...

Creo que vienes a darme la razón, Sursum. La combinación de los colores no expresa nada, sino que lo reproduce. En cambio, las palabras sí expresan, tanto más cuanto más simples son. De modo que el término más vago (por ejemplo, "cosa") es el que mayor campo denotativo ostenta.

En la esfera lingüística lo complejo no es una mera adición combinatoria de elementos simples. Las palabras no son más o menos complejas según el número de letras que las integren. Lo serán, si acaso, en atención al número de significados que connoten. Nada más difícil de definir y, por ende, más complejo que aquello que remite a todo, como "el ser" o "la verdad".

Una explicatio, pues, presupone una complicatio o síntesis cifrada. El alma requiere la memoria para reproducir datos brutos e integrarlos en su noción unitaria y consciente. Pero en absoluto le hace falta tal cosa para expresar la experiencia de estos datos, mientras mantenga algún grado de sensibilidad. Nadie siente de la misma manera y, por tanto, sentir no puede equipararse a reproducir, siendo en cambio una forma primaria del expresar.

Esto basta para probar que en el alma cabe todo el universo sin necesidad de ser ella misma un universo.

Daniel Vicente Carrillo dijo...

Hago con esto un nuevo post, para que no nos descolguemos.